A tan solo tres días de concluir su mandato, el presidente Andrés Manuel López Obrador reflexionó sobre su tiempo en el poder y afirmó que no cometió muchos errores durante su administración. Durante su conferencia mañanera del viernes 27 de septiembre en Palacio Nacional, expresó su gratitud por haber evitado errores significativos, aunque admitió que, como en cualquier gobierno, algunos errores fueron inevitables. Sin embargo, subrayó que estos fueron magnificados por sus opositores.
López Obrador destacó que quedaron pendientes importantes en su administración debido al largo periodo de abandono y humillación que sufrió el pueblo mexicano en décadas anteriores. “Fue mucho el tiempo de abandono y humillación al pueblo, hay que seguir adelante”, señaló, justificando que su gobierno no pudo resolver todos los problemas del país en su sexenio.
Al ser cuestionado sobre si su llegada al poder ocurrió en el momento adecuado de su vida, López Obrador reflexionó sobre su trayectoria y la oportunidad que finalmente tuvo de gobernar. Admitió que quedan “muchas cosas pendientes” a pocos días de dejar el cargo, pero reafirmó su compromiso con el bienestar del pueblo mexicano.
Durante su intervención, el presidente hizo una pausa para recordar las elecciones presidenciales de 2006, en las que acusó que Felipe Calderón le “robó” la Presidencia. Reflexionó sobre cómo su gobierno hubiera sido diferente si el resultado electoral hubiera sido respetado. López Obrador aseguró que, de haber sido presidente en ese momento, se habrían evitado muchas de las tragedias que el país ha enfrentado desde entonces, refiriéndose en particular a la llamada “guerra contra el narcotráfico” iniciada por Calderón.
“Nosotros no íbamos a declarar la guerra al narco, hubiésemos atendido las causas y no íbamos a someternos a recomendaciones del extranjero”, dijo. También señaló que su plan de gobierno se habría enfocado en el desarrollo en beneficio del pueblo y que habría evitado las privatizaciones que ocurrieron en esos años.
El presidente comentó que, tras la derrota electoral de 2006, decidió recorrer todo el país, una experiencia que le permitió conocer a fondo el territorio mexicano y a su gente. “Soy el mexicano que más conoce el territorio, no hay ningún mexicano que conozca todos los municipios de México”, afirmó, destacando que ese conocimiento fue clave para su gestión.
En un momento de la conferencia, López Obrador también se refirió a los expresidentes de México, mencionando directamente a Felipe Calderón, Carlos Salinas de Gortari y Enrique Peña Nieto. Comentó que entiende que Calderón siga opinando públicamente sobre temas políticos, señalando que aún es joven y tiene tiempo por delante. “Les queda mucho tiempo y no encuentran una alternativa de cómo ocuparse”, agregó, en alusión a cómo los expresidentes gestionan su vida después del poder.
Con esta reflexión, López Obrador cerró una etapa de su vida política marcada por la lucha social y la perseverancia, dejando claro que, a pesar de los desafíos y las críticas, siente que su legado será positivo para el país.
