Por: Samuel Téllez
La Primera Familia de Marvel está de vuelta y la gran pregunta es:
¿Realmente fue lo que esperábamos?
Ya se estrenó Los Cuatro Fantásticos: Primeros Pasos, la nueva película de Marvel Studios que llegó a romper estigmas y a reivindicar a estos personajes tan icónicos. Y no es para menos: ha sido una de las películas más esperadas de los últimos años.

Recordemos que en 2017, tras la compra de Fox por parte de Disney, Marvel Studios recuperó los derechos cinematográficos de los Cuatro Fantásticos. Desde ese momento, comenzaron a planear una película 100% desarrollada bajo su visión.
Hoy, ese sueño es una realidad. Con un elenco espectacular:
Pedro Pascal como Reed Richards, Joseph Quinn como Johnny Storm, Vanessa Kirby como Sue Storm y Ebon Moss-Bachrach como Ben Grimm, La Mole, Marvel entrega una película que en lo personal, me encantó.

Siento que esta cinta es una de las más “comic accurate” del MCU, es decir, una de las más fieles al espíritu original de los cómics. Aquí los Cuatro Fantásticos no son solo un equipo, sino una familia, y eso se refleja desde la primera escena. La dinámica entre ellos es creíble, emotiva y con una química que se nota natural.
La historia nos lleva a un mundo retrofuturista ambientado en los años 60, donde los Cuatro Fantásticos no solo son héroes, sino una especie de celebridades públicas. Aun así, la película se toma el tiempo de mostrarnos su lado más humano: sus dudas, sus emociones, sus conflictos internos. Y justo cuando creemos entender su mundo, entra en escena el Silver Surfer… y con él, Galactus.

A partir de ahí, todo se transforma en una auténtica ópera espacial que se siente épica y ambiciosa. Y es que eso es lo que son los Cuatro Fantásticos: exploradores, científicos, aventureros del cosmos. Esta película entiende esa esencia y la refleja con fuerza.
Otro punto que me fascinó fue la música. A diferencia de muchas cintas actuales, aquí se apuesta por un score original que acompaña y realza cada momento, sin depender de canciones populares para “conectar”. Es una decisión arriesgada, pero que le da más identidad a la película.
¿Todo es perfecto? No del todo.
El primer acto se siente algo apresurado; da la impresión de que la historia quiere arrancar rápido y eso impide que algunos personajes como: La Mole, tengan más momentos de lucidez individual. Aunque su interacción con el equipo es buena, en escenas de acción queda algo opacado.
También creo que ciertos personajes secundarios pudieron tener más desarrollo antes de que el ritmo se acelerará tanto. Pero, sinceramente, las cosas buenas superan por mucho a las malas.

Al final del día, Los Cuatro Fantásticos: Primeros Pasos es una película emocionante, visualmente impactante y narrativamente sólida. Respeta la esencia de sus personajes y expande el universo Marvel con una nueva energía.
Y sí: es un gran paso para el futuro del MCU.