Un menor de 11 años, que fue víctima de bullying o acoso escolar en el municipio de Santiago de Anaya, en Hidalgo, murió la noche del martes en un hospital de la capital.
Adriel “N” perdió la vida en un hospital de la capital tras sufrir presuntamente un caso de bullying en la primaria Benito Juárez, ubicada en Santiago de Anaya. Según relatos de sus padres, el menor fue agredido por dos compañeros en el salón de clases, lo que le causó graves lesiones internas, incluyendo un traumatismo craneoencefálico y fractura de clavícula.
Aunque la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo sugirió inicialmente que se trató de una caída accidental, la versión de los padres y la gravedad de las lesiones del niño plantean dudas sobre esta explicación. La familia afirma que el director de la escuela llevó al niño a casa después del incidente, donde se quejaba de dolores y relataba la agresión sufrida por parte de sus compañeros.
Tras cuatro días en coma, Adriel finalmente falleció, sumiendo a sus seres queridos en una profunda pena y desolación. La comunidad ha iniciado una campaña en busca de justicia, exigiendo una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y castigar a los responsables. Este triste suceso ha puesto de relieve la urgencia de abordar el problema del acoso escolar y proteger a los niños de cualquier forma de violencia en el entorno educativo.